ECONOMÍA CIRCULAR
¿Qué es la economía circular?
Es un modelo de producción y consumo que implica compartir, alquilar, reutilizar, reparar, renovar y reciclar materiales y productos existentes todas las veces que sea posible. De esta manera, se prolonga la vida de ese producto.
Con todo ello, se pretende reducir la cantidad de residuos que se producen al mínimo. Por el contrario, el modelo económico lineal está basado en el concepto de “usar y tirar”, lo que requiere grandes cantidades de materiales y energía baratos y de fácil acceso.

Todos conocemos las 3 erres típicas:
- Reciclar: utilizar residuos como materia prima para la creación de nuevos productos.
- Reutilizar: consiste en alargar la vida útil de los productos, bien usándolos para el mismo fin para el que fueron creados o dándoles nuevos usos.
- Reducir: si reducimos la cantidad de residuos que generamos estaremos también reduciendo el gasto de materias primas, agua, consumo de energía y a su vez reduciendo la contaminación.
Pero si realmente queremos adecuar nuestro estilo de vida a la economía circular, debemos añadir a esas 3 erres otras cuatro más para “cerrar el círculo”:
- Rediseñar: en el momento de la creación de un producto es donde se puede replantear qué materiales se utilizarán y cómo será el proceso de creación para que sean productos sostenibles y respetuosos con el medio ambiente.
- Reparar: cuando un producto se estropea, tendemos a tirarlo y comprar uno nuevo, si en vez de introducir en el sistema otro elemento, reparamos el que ya tenemos, estaremos ahorrando en materias primas, energía y no generaremos residuos.
- Renovar: actualizar objetos antiguos para que puedan volver a servir para lo que fueron creados.
- Recuperar: recoger materiales que ya han sido utilizados para introducirlos en el proceso productivo.
Además de estas “erres”, podemos añadir más, como REFLEXIONAR a la hora adquirir un producto, pensar si realmente lo necesitamos o si existen alternativas más ecológicas o sostenibles para cubrir esa necesidad. Y también podemos RECHAZAR productos que tengan un gran impacto ambiental.
Al aplicar estas “erres” vamos a ayudar al medio ambiente siendo consumidores responsables, además de favorecer nuestra economía familiar. Las empresas que aplican los principios de la economía circular en su producción, reducen costes y disminuyen el uso de materias primas lo que protege al medio ambiente realizando una producción sostenible. Al reducirse los costes de producción, el precio de los productos se reduce también repercutiendo en el ahorro del consumidor.
Podríamos decir que todas estas “erres” se engloban en una principal REDUCIR. En la Unión Europea se generaron casi 225 millones de toneladas de residuos municipales en 2019, lo que corresponde a 502 kg por persona. En España concretamente, las cifras fueron de 476 kg por persona, cifras que se han visto incrementadas en 2020 con un total de 483,9 kg por habitante. Por lo tanto, debemos implicarnos seriamente para reducir esos residuos al mínimo de tal modo que cuando un producto llegue al fin la de su vida, mantengamos los materiales que lo componen dentro de la economía, siempre que sea posible, para que puedan ser utilizados una y otra vez creando así un valor adicional.
CONTACTO
Complejo Agroambiental en Madrid | Soto del Henares
ENLACES DE INTERES
Economía circular – Wikipedia, la enciclopedia libre
Reciclaje – Wikipedia, la enciclopedia libre